La nutrición se ha convertido en uno de los ejes principales de la educación en los colegios y escuelas infantiles. Algunos de ellos lo integran dentro del propio proyecto educativo, ya que es una pata fundamental en el desarrollo y educación de los más pequeños. Cuanto antes comencemos a acostumbrarles a comer de una manera saludable, integrando alimentos de buena calidad y alejados de azúcares y grasas saturadas, antes se acostumbrarán a este tipo de alimentación y rechazarán otro tipo de comida.
Pero en el proceso de acostumbrarles a una dieta sana, siempre aparecen obstáculos y a los padres les surgen diferentes dudas. Roser Montané, nutricionista de las Escuelas Infantiles Nemomarlin, responde a algunas de las más frecuentes.
Por ejemplo, ¿por qué hay niños que comen más fruta y otros que no?
Es sabido por un gran número de padres y madres que la primera papilla de frutas suele ser un fracaso. El motivo es sencillo: el bebé está acostumbrado al sabor dulce de la leche y la papilla al llevar cítricos tiene un sabor ácido importante. Los nuevos sabores y especialmente los ácidos deben introducirse con paciencia y aumentando progresivamente las cantidades. Por ello se recomienda que la primera papilla sea casi sin naranja y progresivamente ir aumentando la cantidad de cítrico. En cambio, las papillas con base de manzana, plátano y pera son ideales.
Cuando el bebé crece y empieza a tomar todo tipo de frutas, se debe respetar el gusto del niño. Es decir, pasa un poco como con los adultos, hay niños a los que les gusta más la fruta dulce y otros tienden más a la fruta más ácida. Si respetamos sus gustos, tomarán la fruta con más ganas y conseguiremos que poco a poco y con paciencia tomen un poco de todo.
¿Qué tipo de educación nutricional tenemos que darles?
Debemos educarles dando ejemplo, es decir, si ofrecemos para cenar una papilla de verduras y pescado a nuestros hijos, nosotros no podemos cenar una pizza. La infancia es una etapa muy importante para sentar las bases nutricionales de nuestros hijos, y ellos nos imitarán comiendo lo que nosotros comemos. Una alimentación sana y equilibrada adecuada para la edad de los pequeños de la casa es una garantía de salud para toda la familia. Tenemos a nuestra disposición gran variedad de alimentos disponibles en nuestro entorno que harán aprender diversos sabores a los niños. Es momento de aprovechar y compartir el rato de la comida con ellos para enseñarles esa gran variedad gastronómica.
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